Hoy hemos tenido el placer de comer en un patio típico mallorquín del centro de Palma. Es un palacio del siglo XVII que se ha reconvertido en un elegante y acogedor hotel boutique, el Boutique Hotel Can Cera, donde además de pasar unos días de descanso puedes saborear los exquisitos platos de la cuidada carta de su restaurante.
El Restaurante
Al llegar al Boutique Hotel Can Cera nos dan la bienvenida unas puertas de madera, originales de la época y perfectamente restauradas que dan acceso al interior, donde un amplio patio mallorquín luce como si el tiempo se hubiera detenido.
A la izquierda está ubicado el restaurante, el Gastro Bar Can Cera, con mesas en el interior del mismo y mesas en el patio. Al fondo está el acceso al hotel, la recepción y una señorial escalera que da acceso al piso superior.
Nos sentamos a comer en el mismo patio, en una mesa de mármol perfectamente a juego con el ambiente y la decoración. La primera copa de vino no tardó en llegar y empezamos a imaginar cómo sería la vida de aquellos que residían antiguamente en este palacio que, como muchos otros mallorquines adinerados, hacían vida en los patios como símbolo de poder y estatus social.
La carta
Empezamos a leer la carta, que aunque no es extensa, tiene una perfecta y cuidada variedad de platos y sabores.
En el Boutique Hotel Can Cera puedes comer desde unos tagliatelle con pesto de albahaca y piñones hasta un solomillo de ternera con patatas fritas y salsa Bearnesa, pasando por una lubina confitada sobre puré de patatas al olivo y emulsión de pimientos asados. La elección es bastante difícil.
Los entrantes
Para ir abriendo boca pedimos una selección de quesos con mermelada de higos, unos calamares a la andaluza con ali-oli de naranja y un pan de cristal con tomate de ramallet y aceite de oliva virgen ¡Una forma perfecta de empezar a comer!
La selección de quesos con mermelada de higos nos la sirven sobre una tabla de madera con siete tipos diferentes. Siete sabores intensos que hacen que caigan rendidos aquellos paladares amantes de los quesos.
El pan de cristal con tomate de ramallet y aceite de oliva virgen junto a los calamares a la andaluza con ali-oli, son los entrantes perfectos para un día de verano que acompañan perfectamente con la selección de quesos.
Los platos principales
Después de mucho pensar, finalmente nos decantamos por los siguientes platos principales, todos delicadamente elaborados con ingredientes de primera calidad y con unos sabores que te hacen prometer volver.
- Arroz cremoso de gambas y azafrán
- Pulpo asado con patató y pimentón de la Vera
- Steak tartar con «pommes frites»
- Lubina confitada sobre puré de patatas al olivo y emulsión de pimientos asados.
Los postres
Después de comer es hora de los postres. Aquí tenemos otro dilema porque la elección es difícil.
La combinación de sabores y colores de los postres que al final hemos elegido hacen vibrar de gusto a la vista y al paladar. ¿Quién se puede resistir a estos postres?
El veredicto
Decir que volveremos suena a poco, porque la experiencia ha sido realmente muy buena.
Poder disfrutar de una gastronomía exquisita en un patio típico mallorquín de un palacio del siglo XVII en pleno de centro de Palma es para volver, una y cien veces más.